RUDOLF SCHENKER “Cuando Lemmy murió parecía que el destino estaba llamando a nuestra puerta”.

Rudolf Schenker ha explicado recientemente por donde tuvieron que pasar hasta llegar a la situación de prescindir de James Kottak hasta llegar a Mikkey Dee.
“Estoy muy triste con que James no pueda estar con nosotros. Siempre pensé que él sería nuestro batería hasta el final de nuestra carrera. Le hemos dado muchas posibilidades, le pagamos la rehabilitación e hicimos todo lo posible para que volviera a ser el que era. Pero James no es una persona estable e intentamos llevarlo por el camino correcto pero no pudimos cambiarlo. Le pedimos que se centrara en su curación en Los Angeles y se dejara de tantos viajes a Europa pero hacía caso omiso.
Cuando Lemmy murió de alguna manera parecía que el destino estaba llamando a nuestra puerta. Fue un momento en que no estábamos seguros de que hacer. Le dijimos a James que se quedara un poco más en rehabilitación y metimos a Mikkey porque era tan fan de Scorpions como nosotros de Motorhead. Algo cambió en Scorpions, Había más energía, fue como un amor a primera vista, ensayamos y todo funcionó de maravilla. Le dijimos a Mikkey que eres nuestro chico, Matthias le volvió a llamar porque eran amigos hace años y empezamos a trabajar juntos.
Dee ha traído un nuevo aire a Scorpions, una nueva y renovada energía, aunque nos hubiera encantado acabar con James. Pero en estos 52 años de carrera hemos tenido que cambiar algunos miembros importantes por filosofía de la banda desde el 65 que es cuando empezamos realmente. La música es lo primero y también tener la gente con la química necesaria para que todo funcione perfectamente así como construir una amistad alrededor de los miembros del grupo. Creo que todo eso es lo que ha hecho que Mikkey se quede con nosotros. Llegamos a un momento en que supimos que James no sería capaz de lograrlo”.
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