Historia

La escena gótica es una subcultura surgida del punk a finales de la década de 1970 y reconocida por primera vez a principios de la década de 1980. Debe su nombre a la música que la prensa musical de la época calificaba de gótica. Se cree que el mánager de Joy Division no era del todo inocente cuando respondió "música gótica" a un reportero de la BBC cuando le preguntaron qué estilo de música tocaría el grupo Joy Division. Pero aquí hay un montón de teorías.


El rock gótico era la música original de la escena y los góticos eran los jóvenes al frente del escenario que retomaban temas como la muerte y la fugacidad, copiaban el estilo oscuro de las bandas y lo refinaban con referencias a viejas películas de terror. Hoy en día, el gótico está directamente relacionado con la fascinación por los temas morbosos, que también se representa de cara al exterior. La individualidad, un poco de rebeldía y la intención de que nos dejen en paz están detrás de los escalofriantes conjuntos góticos actuales.


El gótico no tiene nada que ver con los godos y sólo marginalmente con las catedrales góticas. Más bien, gótico significa aquí "oscuro" e "inquietante", quizá también "triste" y "anhelante". Al principio, la palabra se refería a música que sonaba igual y se diferenciaba claramente de otros géneros de la época.


Entre 1982 y 1983, el término "goths" se hizo cada vez más popular. Ian Astbury, vocalista de la banda "The Southern Death Cult", calificó de "góticos" a los fans de Sex Gang Children y poco después él mismo proporcionó la plantilla para el uso posterior del término. El periodista musical Tom Vague calificó al público berlinés que veía a Astbury en el escenario de "hordas de góticos". Los periodistas habían encontrado su encasillamiento. En 1984, numerosos artículos sobre la nueva y extraña cultura juvenil habían aparecido en la prensa inglesa, retomando y difundiendo el término "gótico".


Hacia mediados y finales de los 90, la escena gótica cosechó muchos titulares negativos cuando varios asesinatos se relacionaron con ella porque los autores eran góticos. Rápidamente se asumió que la culpa era de la propia escena, porque la música oscura y las letras sobre la muerte y la fugacidad influían en la gente. Aparecieron numerosos informes y artículos que, o bien jugaban con el tópico, o bien disipaban las sospechas.


A principios del siglo XXI, "gótico" se convirtió en un término de moda y una etiqueta popular para todo tipo de productos. Los productores de moda lo utilizan para caracterizar prendas especialmente oscuras, sombrías y modernas. Lo gótico se ha convertido en un término de marketing y, por tanto, ha caído en descrédito entre los miembros de la escena. Desde hace algunos años, la gente vuelve a llamarse conscientemente Grufi o Waver para no tener que utilizar el término comercializado "gótico".


En la sociedad, "gótico" es desde hace tiempo un término familiar para referirse a jóvenes y adultos que pasean con ropa negra y escuchan música "extraña". Para destacar como gótico, como era posible en los años 80, hoy hay que recurrir a estilismos cada vez más drásticos. El mainstream pisa los talones a los góticos.